Previa:
La cuarta fecha es la primera que encuentra al conjunto Albinegro completo. Incluso la vuelta (ahora a la tribuna) de un ídolo de la institucion: Walter Hermo.
1. Leonel H.
¿8?. Yoni
10. F. Tomasic
6. Julian
5. Facu C.
15. Lukas
Aguardan 2. Danel H. ; 9. Juan Cruz ; ¿7?. Cesar
.
El equipo a carear es La Re Pandilla, conjunto vecino que viene afilado en el torneo después de dos triunfos y un empate, se encuentra actualmente liderando el certamen y posee al máximo goleador del mismo (Alan, 9 tantos). Sin embargo sufre la ausencia de una de sus figuras, es que Gonza se pierde el partido por haber visto la roja una semana atrás.
Justiciero: El Dolape
.
Partido:
Como buen 1º de Mayo (Salud y felicidad), el cotejo tuvo que trabajarse, y mucho. De principio a fin practicamente no se sacaban ventajas y las situaciones de riesgo se hacían esperar. El juego era muy peleado en la mitad de la cancha. Partido chato, sin llegadas, trabado, “una final” se escucha la voz lejana de un boludo en el medio del zapping. Hasta que una jugada "marca registrada" Decadentes encontró la abertura del marcador, "¿Que?, ¿una jugada en conjunto con varios toques?, ¿un hermoso remate desde afuera al ángulo?, ¿una jugada individual dejando 5 tipos en el camino y definiendo con maestría?". No, no, no, nada de eso. Típica jugada con rebotes y una cabeza que aparece para que la pelota lentamente sobrepase la linea y se grite gol. Julian es el dueño de ese cabezaso que le daba la ventaja al Deca. A partir de ahí, La Re Pandilla intento mas, pero se quedaba en intentos, ya que no llegaba con demasiada claridad al arco rival. El juego ofensivo estaba bien contenido por la resistente defensa Albinegra. El partido se hacia muy cortado y feo. Hasta que Corva tomo un remate de afuera y como Plusmar en temporada alta: letal en la media y larga distancia, puso las cosas 1 a 1. Con el empate el Deca vivió esos momentos que le ocurre en todos los partido: el momento del desorden, del descontrol, del desconcierto, de la desorganización, de la mezcolanza, de la anarquía, de la confusión, del alboroto, del caos, del pandemónium, de la perturbacion. (ok, paro acá) Y la pandilla tomo las acciones y creo alguna que otra situación sin llegar a mayores hasta que el juez dictamino el fin de la parte.
.
En la segunda mitad todo arranco practicamente igual que en el cierre del primer capitulo. Es que Decadentes no sabia cómo generar juego o, Dios no lo permita, peligro en el arco contrario. Y defensivamente era un espanto. Los Pandilleros ahora tenían más posesión. Se la prestan, se presionan, se rotan, la pierden, se vuelven a amar. Y como dice el Doctor Bilardo: "Corner mal pateado, gol del rival". Incorrectamente plantado defensivamente se vio como un rechazo cayo en las piernas de Brian que corrió varios metros con el balón en sus pies y definió certeramente ante el achique del 1º Albinegro. Momentos mas tarde pudieron ampliar la ventaja, pero el tiro libro de Milton se estrello en el travesaño. Era de esperarse que ante tamaño panorama el Deca apueste a su mejor carta, "insisto, ¿el juego asociado?, ¿el toque?, ¿la rotación?, ¿el tiki tiki?". No, no y recontra no. Apelo a la garra, el empuje, el sacrificio. Y de esta manera fue acercándose, timidamente, al arco rival. Y poco quedaba para el final del partido cuando de un lateral (muy discutido por La Pandilla), llego un remate defectuoso, donde el arquero dio rebote y ahí, en el lugar indicado, en el momento indicado y a la hora indicada estaba Danel para, con toda su frialdad definir y poner el partido pardo, 2-2. Después de casi una vida sin verle la cara a Dios, El melli gritaba su primer gol con la Albinegra y se abrazaba con una tribuna que se venia abajo. Y lo que se sufrió el sábado pasado con goles sobre la hora se festejo este, ya que después del empate La Re Pandilla se distrajo, perdió el orden y las marcas y una pelota suelta por el aire cayó en los pies de Lukas que mano a mano definió como los grandes, suave abajo y que decir. 3 a 2 en un partido durisimo. Quedaba poco para el cierre y Decadentes aguanto el resultado con oficio para terminar consiguiendo 3 puntos que hasta hace un ratito parecían impensados.
.
Para redondear apelaremos a una frase gastadisima si las hay: "Decadentes lo gano a lo Decadentes". Es que (apelando a la fecha) jugar un partido con la camiseta del Deca debería ingresar en la legislación laboral como trabajo de riesgo. Quien diga que el Albinegro envejece, tiene toda la razón, porque jamás va a ganar un partido pasando la mayoría del partido tranquilo.
Pero en un torneo que se plantea como sufrido, luchado, sin descanso ni respiro se consiguió un triunfo importantísimo que posiciona al Deca mas que bien para el futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario